Lo que parecía ciencia ficción, cada vez está más cerca de convertirse en realidad. Durante años, la humanidad ha contemplado la idea de vivir o siquiera de pasar unas vacaciones sobre la superficie de la Luna o de Marte. Uno de los factores que lo ha impedido, es el no saber cómo crear una fuerza de gravedad similar a la de la Tierra que facilite la existencia y no interfiera con la salud.
Japón es uno de los países que le ha apostado a este ambicioso plan para que la humanidad pueda tener un lugar fuera de la Tierra a más tardar en la mitad de este siglo XXI. El proyecto que desarrolla este país para lograr el propósito está constituido de tres objetivos.
Primero, esperan generar infraestructuras en la Luna y Marte. Segundo, buscan que tales ecosistemas permitan la vida. Y tercero, quieren poner en funcionamiento un sistema de transporte entre el planeta rojo, el satélite y la Tierra, algo que se conocería como viajes interplanetarios.
El proyecto está protagonizado por la Universidad de Kyoto y Kajima Corporation, una de las empresas constructoras más antiguas y grandes de Japón.
“La humanidad ahora pasa de la era de ‘permanecer’ en el espacio a la era de ‘vivir’ en la Luna y en Marte”, anunciaron mediante un comunicado, los investigadores.
La base, a la que han denominado Lunar Glass, tiene forma de un cono, casi 400 metros de altura y da una vuelta completa cada 20 segundos: la fuerza centrífuga creará la gravedad necesaria para la existencia humana.

Una mini Tierra en la Luna, una estructura diseñada para incluir extensiones de agua, vegetación (parques, árboles) y viviendas, además luciría como un enorme cono vertical giratorio y sus paredes serán de vidrio.
“Podrán tener hijos sin ansiedad y mantener una condición física que les permita regresar a la Tierra en cualquier momento”, señalaron los encargados del proyecto.
Además, el proyecto tiene su propio sistema de transporte, el cual conectará a la Tierra, Marte y la Luna de manera sencilla. De acuerdo a los bocetos presentados, los viajes de largo plazo se harán en trenes y serían semejantes a lo que actualmente se encuentran en el país asiatico. Esta no será una línea convencional de tren, pues tendrá que incluir un modelo giratorio “para minimizar los efectos en la salud dada la baja gravedad”.

Si los bocetos y la investigación toman un buen rumbo, seguirán con el segundo paso, el cual consiste en la construcción de la infraestructura y reunir los requisitos humanos, legales y logísticos para establecerla en el espacio.
Para Japón, su proyecto es muy diferente a los trabajos que desarrolla, por ejemplo, Estados Unidos, con los cuales busca pisar la Luna de nuevo en 2025 con la misión Artemisa tras Apolo 17 que ondeó la bandera americana en 1972.
“Estamos convencidos de que los tres objetivos de nuestra propuesta no están en los planes de otros países. Desarrollamos tecnologías centrales que son esenciales para garantizar la migración espacial humana en el futuro”, concluyó Yosuke Yamashiki, doctor en Ingeniería de la Universidad de Kyoto.
Los promotores de este proyecto trabajan con un horizonte a largo plazo, es por ello que este vería la luz en el año 2050.
Estos son los videos de presentación del Lunar Glass, Marte Glass y el sistema de transporte espacial.