En Bangladesh un rayo cobra la vida de 16 familiares en el día de una boda

En un día que debería haber sido de celebración y alegría, Mamun, un joven de 21 años de edad, que se preparaba para su ceremonia nupcial en casa de sus suegros en Shibganj, en el noroeste de Bangladesh, un rayo había impactado contra el barco en el que su familia se dirigía hacia la boda. 

La familia había partido hacia la ceremonia; sin embargo, una repentina tormenta cambió el curso de los acontecimientos, el barco, buscando refugio bajo un cobertizo de metal a orillas del río, se convirtió en el epicentro de los rayos.

Mamun llegó corriendo hacia la escena del caos y la confusión, solo para encontrarse a sus seres queridos caídos por el impacto del rayo, entre el dolor y la desesperación, Mamun presenció cómo su familia yacía sin vida.

El joven perdió a su padre, abuelos, primos, tíos y tías en aquel día, su madre, ausente en el barco, fue la única en salvarse, la noche que siguió fue testigo de funerales y de la distribución del banquete nupcial entre aquellos sin hogar.

A pesar del paso del tiempo y de haber contraído matrimonio posteriormente, Mamun se ve incapaz de celebrar su aniversario de bodas, pues los recuerdos dolorosos de aquel día persisten inquebrantables en su memoria. 


El caso de Mamun no es aislado en Bangladesh, un país que sufre en promedio 300 muertes al año a causa de los rayos, una cifra alarmante si se compara con las menos de 20 muertes anuales registradas en Estados Unidos, a pesar de tener una población casi el doble, este contraste revela la gravedad del problema al que se enfrenta Bangladesh.

El aumento de las tormentas y las descargas eléctricas se atribuye en gran medida al cambio climático, una realidad innegable que ha llevado al gobierno de Bangladesh a incluir los rayos en la lista oficial de desastres naturales que enfrenta el país, junto con inundaciones, ciclones, terremotos y sequías.

Ante esta crisis, los activistas abogan por soluciones que van desde la plantación de árboles altos en áreas rurales para amortiguar el impacto de los rayos, hasta la construcción de refugios seguros y sistemas de alerta temprana más amplios.

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