En un pronunciamiento la Procuradora General de la Nación, Margarita Cabello Blanco, ha expresado su respaldo a considerar el uso habitual de sustancias alucinógenas o estupefacientes como una causa válida para solicitar el divorcio. Este concepto fue presentado ante la Corte Constitucional en el marco de un debate trascendental sobre las causas de divorcio en el país.
Cabello Blanco argumenta que el uso constante de estas sustancias afecta la autonomía personal de un cónyuge y justifica medidas para protegerlo. Según la jefa del Ministerio Público, esta norma busca garantizar la capacidad de elegir el proyecto de vida emocional y familiar, en línea con la dignidad humana, el libre desarrollo de la personalidad, la integridad personal y la protección de los menores de edad.
La Procuradora destaca que esta causal de divorcio es coherente con el deber de respetar los derechos de los demás y no abusar de los propios, la medida se considera apropiada, ya que las causales de divorcio buscan permitir la disolución del matrimonio en situaciones que ponen en riesgo la tranquilidad y la convivencia familiar.
El concepto enfatiza que es esencial permitir que el cónyuge afectado solicite el divorcio de manera autónoma cuando la convivencia se torna insoportable debido a las adicciones de su pareja. Esto, según la Procuraduría, protege los derechos fundamentales de la persona afectada y hace efectivo el deber de respetar los derechos ajenos sin abusar de los propios.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) ha expresado su apoyo a mantener esta causal de divorcio, argumentando que es necesario para proteger a los niños del matrimonio, ya que el Estado, la familia y la sociedad tienen el deber de proteger, a los menores de edad de condiciones que amenazan su desarrollo armónico, como el consumo de sustancias psicoactivas, estupefacientes o alcohólicas.
La magistrada Paola Meneses, encargada de resolver este caso, debe considerar los diferentes puntos de vista presentados en los conceptos y tomar una decisión sobre el futuro de esta disposición en el Código Civil.