La JEP y un avance por la paz sin precedentes

En la última semana, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) le ha regalado a todo el país algo que hace unos años era impensado y que ni la persona más pacífica y optimista se lograba imaginar.  Por medio de las audiencias de reconocimiento del macrocaso 01 (toma de rehenes, graves privaciones de la libertad y otros crímenes concurrentes cometidos por las FARC-EP) se permitió a las víctimas acreditadas pronunciarse frente a quienes conformaron el secretariado de las extintas FARC-EP, o quienes se encuentran con vida y persisten en el proceso de restauración de la verdad, permitiendo así que dichas víctimas elevaran interrogantes que permanecieron durante años en el panorama en el que se desarrolló su secuestro o el de alguno de sus familiares, logrando así un reconocimiento definitivo de responsabilidad y un compromiso de cooperación en pro de la reconciliación, verdad y reparación.

Así como en marzo pasado se llevó a cabo la audiencia correspondiente a los comúnmente llamados “falsos positivos” en la que los comparecientes fueron once militares activos en el momento en que miles de asesinatos se presentaron como bajas ocurridas en combate, ahora siete excomandantes de la guerrilla y el último secretariado, fueron los imputados y los encargados de dar una respuesta a los interrogantes planteados por las víctimas, teniendo en cuenta su responsabilidad en la aprobación y conocimiento del uso del secuestro como medio de financiación y control que ocurrieron principalmente entre 1993 y 2012. 

Lo que viene no es menos importante y trascendental, aún pendiente por confirmar las fechas, se llevarán a cabo las audiencias regionales, en donde las víctimas tendrán un contacto más cercano con la verdad, pues los imputados ahora serán quienes estuvieron presentes y vivieron de primera mano aquellos secuestros, personas que se encargaban de hacer guardia, médicos, cocineros y todo aquel que pueda tener datos que ayuden a aclarar la forma en que se desarrollaron dichos actos. En estas audiencias no solo se buscará información concluyente sobre la manera en que se dieron los secuestros, se busca la verdad detrás de cada uno de estos, el por qué del actuar de la guerrilla y la forma en que cada uno de los casos, a pesar de tener un común denominador, fueron muy específicos en su desarrollo.

El objetivo de todas estas audiencias, más allá del reconocimiento de responsabilidad y la aclaración de un sinfín de incógnitas, es el reunir pruebas y hechos que permitan llegar a la verdad y mediante esto, poder imponer una sanción para cada uno de los imputados. Esto no será fácil y así como todo lo relacionado al posconflicto, llevará tiempo. Si bien, algo es cierto, es que hoy no somos el país al que estamos acostumbrados y la paz dejó de ser una posibilidad, la paz es una realidad y día a día se está construyendo desde el perdón y la reconciliación.

Comparte este contenido:

Sigue más contenido chimba en nuestras redes: