Luego de varios meses de incertidumbre por su liquidación y por el futuro de sus miles de empleados, La cadena de supermercados Justo y Bueno vuelve a ser noticia, pero esta vez por el descubrimiento de varias caletas en donde se encontraron grandes sumas de dinero que aunque pueden ayudar en algo, no se comparan en nada a las deudas que tiene la empresa, mismas que la llevaron a la quiebra y obligaron su cierre.
Se trata de 648 cajas fuertes de las cuales, según informó el agente liquidador, Darío Laguado, se han abierto 272 y la cifra encontrada va por los $2.270 millones. También se dio a conocer que muchas de estas han sido vandalizadas y que se espera poder continuar con el proceso y recaudar mucho más dinero el cual será destinado en 25% al pago correspondiente a la deuda con los expertos que se han encargado de abrir las cajas y transportarlas.
Por otro lado, también se dio a conocer por parte de la ministra de trabajo, Gloria Inés Ramírez, que desde el gobierno se contempla un plan de autorescate para salvar el trabajo de 6.000 extrabajadores de Justo y Bueno, el plan consiste en una empresa fundada por algunos de estos que quieren volver a emplear a sus compañeros, y desde el ministerio se comprometieron a brindar acompañamiento financiero y tecnológico para que la nueva empresa pueda llegar a la meta de generar empleo de forma masiva.
Y es que aunque se esté encontrando dinero, las deudas de la extinta empresa superan los dos billones de pesos y esto no contempla solo a la deuda con los antiguos trabajadores sino también con arrendadores y a los que se les considera el caso más crítico, proveedores; porque son estos últimos a los que Laguado considera más difícil pagarles.
Por ahora se espera seguir con la apertura de las guacas encontradas y encontrar más activos que puedan ser vendidos y así recaudar el dinero necesario para continuar con el proceso de liquidación, así como adelantar nuevas reuniones entre gobierno y trabajadores para darle continuidad al plan de autorescate laboral.