Una mujer de 28 años ha expuesto su experiencia de violencia de género y las continuas amenazas de muerte que ha recibido por parte de su expareja sentimental. A pesar de contar con una medida de protección, la víctima afirma que su agresor persiste en acosarla psicológicamente y a través de las redes sociales. La denuncia reveló la grave situación en la que se encuentra la mujer, quien relató en una entrevista con la periodista Angie Téllez de Arriba Bogotá los detalles de su historia:
La mujer, cuya identidad se mantiene en reserva por motivos de seguridad, compartió los escalofriantes episodios de violencia que vivió durante su relación con su expareja. Según su testimonio, el hombre la sometió a agresiones físicas, llegando a dejarla inconsciente y tendida en el suelo.
«Durante nuestra convivencia, fui víctima de maltrato físico, humillaciones y se me obligaba a dormir en el suelo como castigo por considerar que no merecía la cama. Además, me negaba el alimento y desperdiciaba la comida que yo cogía, argumentando que él la había comprado. También cortaba los servicios públicos y me impedía utilizar el internet. No me permitía usar el baño sin cerrar la puerta, llegando incluso a vigilarme mientras me bañaba. El abuso era constante», manifestó la víctima.
Tras tomar la decisión de separarse de su agresor, la mujer presentó una denuncia que dio como resultado la obtención de una medida de protección. Sin embargo, a pesar de contar con esta medida legal, la violencia no cesó.
Durante el transcurso del año 2023, el agresor volvió a buscarla y la amenazó de muerte a través de las redes sociales. La periodista Angie Téllez indagó sobre las amenazas específicas recibidas por la mujer, descubriendo que el agresor incluso le mostró un arma de fuego como medio de intimidación.
La víctima expresó su temor y desesperación ante la situación: «Desde que me separé de él, el abuso no ha cesado. El maltrato psicológico y verbal continúan. Él es extremadamente celoso y, al enterarse de que tengo una nueva pareja, la violencia se ha intensificado. Recibo amenazas de muerte, mis fotografías personales son difundidas en redes sociales y también amenaza a mi actual pareja».
Ante esta nueva serie de amenazas, la mujer decidió nuevamente acudir a las autoridades para informarles sobre la violación de la medida de protección. Aunque se ha impuesto una sanción y una multa equivalente a dos salarios mínimos al agresor, la víctima considera que estas medidas son insuficientes para garantizar su seguridad.